Un año de prácticas

Un año de prácticas, Esteban Navarro
Mi valoración: 4/5

Fecha de publicación: abril 2021

Leído: marzo 2021 (edic. no venal)

Páginas: 415

Sinopsis

Corre el año 1997 cuando Rebeca Marín, hija de un militar de rango, decide presentarse a las pruebas de acceso de la Policía Nacional, contraviniendo los deseos de su madre. Tras superar el proceso selectivo, y pasar nueve meses en la escuela de Ávila, su primer destino es Barcelona.

En unos días, un inspector con mala fama entre el resto de compañeros, aparece asesinado de un solo tiro en la cabeza. Las primeras investigaciones arrojan que quizá el asesino es otro policía, porque la bala coincide con el arma reglamentaria. Esa noche, Rebeca se percata de que le han robado su pistola. Una llamada anónima le ofrece un trato: recuperar su arma a cambio de algo que ella tendrá que hacer. Si no acepta, la podrían acusar del crimen.

Mis sensaciones

Pues si que es una novela policiaca, sobre todo porque va de policías, hay drogas, prostitución, robo, asesinato, corrupción...menudo abanico.

Son 105 capítulos bastante cortitos que se leen muy rápido, cada uno te deja con ganas de empezar el siguiente. Refleja perfectamente la personalidad de los protagonistas. Rebeca Marín, una chica muy poco espabilada para su edad, porque siempre ha estado volcada en los libros, piensa que es hora de independizarse en muchos sentidos. Su padre, militar de rango, algo machista y chapado a la antigua. Su madre, mujer de militar que se le viene el mundo encima con la decisión de su hija.
Rebeca se prepara para la policía, es muy estudiosa e inteligente y aprueba a la primera. Pasa a la academia y ahí es donde ya empieza lo difícil, relacionarte en una academia con compañeros y compañeras que son capaces de meterte en un lio es otra cosa. Estudiar y aprobar exámenes es fácil pero cuando ya te tienen que evaluar por tu comportamiento..

Descubriremos con ella su iniciación en la sexualidad, algo que no le había preocupado hasta ahora que quiere aparentar ante sus compañeras que no está atontada. Se ve envuelta en el asesinato de un inspector, que era odiado por todos, sin comerlo ni beberlo por culpa de su inexperiencia. A partir de ahí todo es liar más la madeja, cualquier cosa que haga es cubrirse más de fango o que la expulsen. Una trampa muy bien orquestada en la que es complicado tomar una decisión sobre cual es el siguiente paso a dar.
Rebecca tiene un arduo trabajo si quiere salir del atolladero impune o con el mínimo daño posible. Un año lleno de tropiezos y aprendizaje, sobre todo a sobrevivir y convivir con esa profesión ¿Cómo acabará su año de prácticas?

Una trama en la sinceramente, para mi, lo menos importante ha sido quien es el culpable de asesinato, me he sumergido en el día a día de la protagonista y es lo que más me interesaba. En varias ocasiones me había planteado si prepararme para la policía y ha sido un gustazo leer este libro. He acompañado a su protagonista Rebeca desde que estaba en la academia hasta acabar su año de prácticas. He vivido con ella la inexperiencia y el miedo a no hacer las cosas bien, a que la tomaran por tonta y no hacerse valer. Se le ha visto un progreso y seguridad que no tenía al principio. 

Conclusión: he sido policía durante un año sin serlo...

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